Caricaturas, imágenes, estereotipos, burlas, críticas, ¿educación?, miseria, pobreza, crímen.A todo ésto se limita nuestra existencia a medida que hacemos a los medios de comunicación parte de nuestra cotidianidad. Las opiniones que reproducimos ya no son propias, ahora pertenecen a algún periodista que con habilidad se atreve a robarnos los ideales y a crear ingenuidad en nuestros comentarios y nuestro actuar.
¿Quienes somos realmente? ¿Cuáles son los factores que obviamos -o en su defecto ignoramos- y que deberíamos tomar en cuenta a la hora de formarnos como personas? Lo esencial se oculta tras el mundo que ellos forman para nosotros. Llegó la hora de destruirlo y crear uno nuevo, uno para nosotros. Un mundo en el que podamos crear nuestra identidad: nuestra propia identidad.
Escrito por Cronopia
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